Ómnibus al Paraíso

Actualmente la frase “amaos los unos a los otros” tiene un carácter como más urgente, algo así como que si no nos amáramos y pronto muriésemos. La sociedad se encoge de hombros y se ríe ante la idea de un acuerdo mundial que elimine la tensión de las armas disuasivas. Nadie puede negar que hemos llegado a un punto crítico en nuestra historia, en realidad un gran número de fatalistas opinan que hemos sobrepasado el punto sin retorno. Una angustia ritual lo invade todo, la presión rompe las exclusas, el hombre sometido a terror, genera terror, el hombre presionado presiona, el hombre amordazado, herido y fatigado se vuelve insensible al dolor ajeno y sólo está preparado para el mal, al que aborrece, pero pero del que no se puede separar. La realidad es que cada individuo apuesta a favor de la vida y que en conjunto el milagro es posible con sólo aproximar algunos detalles. Que todos busquemos algo que dé real sentido a nuestra existencia, que salgamos de nuestra cápsula de intereses y unamos nuestro corazón a los demás y, para ello, es necesario usar el vínculo poderoso del amor, esa fuerza irrefrenable que cambia vidas, mueve montañas y aproxima al hombre a su futuro luminoso de paz. Así, este libro, de la mano del amor, transmite los caminos sagrados del buen vivir, la alegría, la auto-estima. Vivir cada detalle, cada momento de la vida desde una óptica que en este siglo se ha vuelto repentinamente nueva, la óptica del amor, de la búsqueda de las esencias en el interior de nuestro pensamiento y al alcance de nuestros pasos. Una obra difícil de olvidar, un libro que cambia la vida y la llena de una nueva energía, una nueva y fulgurante luz.