Edipo Rey y Antígona son obras en las que la intensidad dramática recae. Por una parte, en el reconocimiento de las consecuencias de los actos como una forma más de las muchas que puede asumir el destino. Por otra parte, la fuerza intrínseca de Antígona como personaje le ha valido el carácter de personaje arquetípico en la literatura universal.
El drama aparece dividido en dos distintos planos que coinciden pero no se funden: el plano realista de la comedia «de capa y espada» y el fantástico-simbólico del «autosacramental».
Atribuido a Tirso de Molina y datado en torno a 1630, El Burlador de Sevilla, pese a todas las polémicas y controversias, tiene el honor de ser el primer hito en la fecunda y fascinante vida de un mito universal: Don Juan. En este drama fundacional se encuentran los tres rasgos que caracterizan la estructura donjuanesca: el héroe transgresor, el grupo femenino y la muerte; invariantes míticas que serán desarrolladas, transformadas o subvertidas, siguiendo cauces de las más diversas poéticas, por su larga y copiosa descendencia.
Atribuido a Tirso de Molina y datado en torno a 1630, El Burlador de Sevilla, pese a todas las polémicas y controversias, tiene el honor de ser el primer hito en la fecunda y fascinante vida de un mito universal: Don Juan. En este drama fundacional se encuentran los tres rasgos que caracterizan la estructura donjuanesca: el héroe transgresor, el grupo femenino y la muerte; invariantes míticas que serán desarrolladas, transformadas o subvertidas, siguiendo cauces de las más diversas poéticas, por su larga y copiosa descendencia.
Divertida comedia en tres actos que cuenta la historia de una joven que vive en un convento con su tía de donde es sacada por su madre para que se case con un señor de cincuenta años, rico y de buena posición, para que así la joven tenga un futuro estable. La joven envía una carta a su amado secreto diciéndole los funestos planes de su madre. El joven enamorado va al encuentro de la joven para salvarla del destino que su madre le ha impuesto, pero al llegar descubre que su maléfico rival es su tío al que tanto ama y aprecia; el joven, desencantado, se marcha dejándole una carta a su amada despidiéndose para siempre.
Si Calderón de la Barca es el autor teatral barroco por excelencia, cabe decir que La vida es sueño es la obra que sustancia los grandes temas de este movimiento. La historia del príncipe Segismundo, que sale de la cueva en la que había sido encerrado por su padre para convertirse en rey por un breve lapso de tiempo -un tiempo soñado-, antes de ser devuelto de nuevo a ella, da pie a un complejo drama sobre el libre albedrío, la fugacidad de la vida y la falsedad de las apariencias.