Disociaciones y despojos

En la singular obra narrativa de Oscar Collazos es frecuente que el autor se comunique con el mundo de sus relatos, a través del enfoque o la intuición de algún adolescente. La inocencia actúa a modo de filtro: sólo deja pasar lo decisivo, lo sustancial, lo suasorio. En la reducida escala familiar, la figura del padre suele aparecer como una síntesis de violencia. Sin embargo, esa figura tiene una doble dimensión: para el niño o el adolescente, el padre es una suerte de verdugo doméstico; para el lector, en cambio, es sólo una victima más de la rutina y el desamparo, de la indigencia y el subdesarrollo. Este elemento, veladamente auto-biográfico, que traia un peculiar estremecimiento a los cuentos ya conocidos de este joven narrador colombiano, en Disociaciones y Despojos es asumido en forma directa, como un dramático testimonio que hace aun más palpitante esta honda expresión individual.
Mario Benedetti