La centuria negra. Los origenes y el retorno de la extrema derecha rusa

En este trabajo sin precedentes, el conocido historiador Walter Laqueur estudia uno de los movimientos políticos más importantes surgidos en rusia desde la caída del comunismo. El derrumbe de la unión soviética llegó de la mano del revival de la extrema derecha, cuyas raíces datan del siglo pasado y cuyo auge actual depende en gran medida del desastre económico y la falta de una tradición democrática madura. Descuidada por los expertos desde su derrota en 1917, la extrema derecha fervorosa cultivadora del satanismo o del racismo ha ocupado ahora un lugar preponderante en la política “correcta”. No es la única paradoja de ello el que cuente entre sus aliados a sus antiguos archienemigos, los comunistas.
La centuria Negra es el primer retrato detallado de la derecha rusa contemporánea. Laqueur rastrea los orígenes de este movimiento a los eslavófilos y a la “centuria negra” original, un movimiento populista, xenófobo y profundamente antisemita. Sus ideas han llegado hasta este siglo bajo la convicción de que hay una conjura universal, alentada por los masones, los judíos y los demócratas, en contra de los intereses y la mera existencia del pueblo ruso. Echando mano de documentos hasta ahora desconocidos, Laqueur analiza grupos como Pamyat, abiertamente fascista y antisemita; varias facciones monárquicas; sectas fanáticas dentro de la iglesia ortodoxa; los renacidos cosacos; y los “nuevos nacionalistas”, que se oponen a todo acercamiento al oeste. Sus creencias, su culto, giran en torno a la magia negra, la astrología y el paganismo, todo ello impregnado por una curiosa manía de persecución.
Laqueur distingue claramente entre el patriotismo ruso legítimo y las fantasías patológicas de la extrema derecha, e investiga las orientaciones económica, social y política de esta última. Pese a sus divisiones internas, la derecha está convencida de que “el tiempo está a nuestro favor”, y aspira a devolver a rusia una hegemonía mundial.