La clave de la grafología

Uno de los problemas más intrigantes y de mayor importancia para ti, amigo lector, lo mismo que para mí y para todos los mortales, es averiguar cómo somos en realidad por dentro, cuáles son nuestras aptitudes fundamentales para alcanzar el mayor éxito en una profesión que
“nos venga a la medida”, cuáles son y dónde radican nuestros principales defectos, esos defectos que nosotros mismos somos los primeros, y a veces, los únicos, en ignorar, porque los llevamos a la espalda, como dice Esopo en su famosa fábula de las dos alforjas, no queriendo poner las intimidades de nuestra conciencia ante el espejo de un examen atento e imxarcial.
De similar importancia y más intrigante todavía, es el problema de averiguar cómo son en realidad los demás, por debajo de la máscara o disfraz que, más o menos conscientemente, casi todos se ponen en la fachada de su personalidad, a fin de no trasparentar sus verdaderos sentimientos y motivos de obrar.