Rey Jesús

A pesar de las numerosísimas investigaciones y estudios que se le han dedicado, Jesús continúa siendo uno de los grandes enigmas de nuestro pasado, y uno de los personajes que más ha alimentado la imaginación del hombre a lo largo de los siglos. El propósito de Robert Graves al enfrentarse de nuevo a la historia de tan singular personaje fue mostrar que el veredicto de los estudiosos había sido hasta entonces sumario en exceso, y que dejaba de lado aspectos tan importantes como la masacre de Belén, la Tentación y otros incidentes enigmáticos. Graves sostiene que, si quitamos las capas de barniz y los retoques que con el paso del tiempo han ido empañando la historia original (en un principio más por razones políticas que doctrinarias), se advierte que Jesús no era ni un mago espiritual, ni un megalómano (como opinan los racionalistas) ni un ser omnipotente disfrazado de hombre (como sostienen los católicos), sino el heredero legítimo del trono de Heredes, un profeta invariablemente fiel a la ley judía y personaje central de una compleja y conmovedora tragedia.A partir de este planteamiento, y con el talento narrativo que le caracteriza, Graves puso en pie una de las novelas históricas más controvertidas y leídas de todos los tiempos.’