El arte de magnetizar

El ser humano está dotado de poderes que realmente escapan a lo puramente físico, y permiten, de una manera u otra, trasponer ese linde encantado de lo mágico y legendario para internárse en la manifestación de las facultades asombrosas de la mente.
Sin duda, a través de los siglos, esta cuestión mereció los más variados comentarios, por influjo ora de la ignorancia, ora del prejuicio.
ora de la sabiduría, que prefería ocultar lo que el vulgo no estaba aún preparado para entender sobradamente.
Y hoy en día, hablar de tales fenómenos no deja de tener peculiar atractivo, en especial, cuando la exposición se despoja, convenientemente, de una gravosa sucesión de tecnicismos que la tornen difícil de comprender. Por ello, el arte de magnetizar, de David Perry, es un acierto, que con el lenguaje más sencillo y claro posible, pone a disposición del público en general los aspectos más importantes, valiosos y prácticos del magnetismo, del sonambulismo, del hipnotismo y de la sugestión. En pocas palabras: una obra atractiva, instructiva y veraz.