Años después de la caída del muro de berlín, en vísperas del siglo XXI, un grupo de antiguos espías de la desaparecida república democrática alemana es encargado de organizar un encuentro con los ex agentes que aún siguen en activo y al servicio de otros países o de grupos internacionales. Desde 1989 se ha intentado en varias ocasiones celebrar esta asamblea cuyo objetivo es trazar líneas estratégicas que devuelvan a los miembros de la Ilamada Stasi a la escena política.