Si Calderón de la Barca es el autor teatral barroco por excelencia, cabe decir que La vida es sueño es la obra que sustancia los grandes temas de este movimiento. La historia del príncipe Segismundo, que sale de la cueva en la que había sido encerrado por su padre para convertirse en rey por un breve lapso de tiempo -un tiempo soñado-, antes de ser devuelto de nuevo a ella, da pie a un complejo drama sobre el libre albedrío, la fugacidad de la vida y la falsedad de las apariencias.