Jack London (San Francisco, 1876 Gren Ellen, California, 1916) convirtió su vida en la más fantástica de sus aventuras. Arrastrado por la fuerza de su propia personalidad romántica, rebelde y contradictoria, desempeñó los oficios más dispares: voceador de periódicos, marinero, cazador de focas, buscador de oro, periodista y corresponsal de guerra… Lector compulsivo y de imaginación febril, pronto comenzó a escribir relatos sobre los escenarios y personajes que había conocido.
La llamada de la selva (1903) es una novela centrada en el mundo animal. En ella se narra la historia de Back, un perro que nunca leía los periódicos porque disfrutaba de las comodidades de la civilización en un rancho de California. Pero la insensibilidad de los hombres hará que se enfrente a un mundo hostil y salvaje, que lo pondrá a prueba. Y de esa lucha saldrá triunfante, porque back regresará a sus primitivos orígenes.
La llamada de la selva (1903) es una novela centrada en el mundo animal. En ella se narra la historia de Back, un perro que nunca leía los periódicos porque disfrutaba de las comodidades de la civilización en un rancho de California.
La llamada de la selva (1903) es una novela centrada en el mundo animal. En ella se narra la historia de Back, un perro que nunca leía los periódicos porque disfrutaba de las comodidades de la civilización en un rancho de California.
La llamada de la salvaje (1903) es una novela centrada en el mundo animal. En ella se narra la historia de Back, un perro que nunca leía los periódicos porque disfrutaba de las comodidades de la civilización en un rancho de California. Pero la insensibilidad de los hombres hará que se enfrente a un mundo hostil y salvaje, que lo pondrá a prueba. Y de esa lucha saldrá triunfante, porque back regresará a sus primitivos orígenes.
Nos encontramos ante el prototipo del héroe autodidacta americano que intentó experimentar a lo largo de toda su vida aquello que escribía. Su obra es un himno a la naturaleza y a la libertad del hombre, y su exitosa difusión lo convirtió no solo en un mito para los lectores de su época, sino también para los de generaciones venideras. Durmió en la cárcel, fue buscador de oro en el Klondike, cazador de focas, contrabandista, vagabundo, corresponsal de guerra, marinero, pescador y, sobre todo, un incansable y experimentado viajero, trasladando así sus intensas experiencias y recuerdos vitales a su vasta obra literaria.
En sus relatos de aventuras ambientados buena parte de ellos en el helado Norte o en los fabulosos Mares del Sur el impulso de supervivencia compensa la fragilidad del hombre abocado a situaciones de extrema dificultad y violencia. Entre sus obras destacan Colmillo blanco y La llamada de la naturaleza.