El espectacular desarrollo de los medios masivos de comunicación social ha ido acompañado de un creciente interés, e incluso preocupación, por sus posibles efectos sobre las actitudes humanas. La imagen de la pluma como algo más poderoso que la espada tiene su versión actual en la de que los medios de comunicación de masas poseen una fuerza mayor que las bombas atómicas.
La investigación ha reflejado ese interés y esa preocupación proporcionando una documentación tan vasta como variada, aunque en general inconexa y, a veces, contradictoria.