Animales y hombres

Al comenzar este libro, ya G. S. Cansdale defiende resueltamente a los animales al decirnos sin ambages “que se ha convertido en un tópico considerar al hombre como el dueño y señor de la creación”. Este imperio y esta hegemonía,
Según se deduce del libro se obtuvieron mediante la fuerza y la destrucción de otros seres que poblaban la tierra. El relato de la eliminación persistente y la paulatina pero eficaz extinción de ciertas especies, constituye para el autor de animales y hombres uno de sus temas más íntimamente preferidos.
G. S. Cansdale conoce tanto o más a los animales que a los hombres. Los ha estudiado, no con la frialdad objetiva del científico, sino con el interés y la pasión del enamorado. Sus profundos conocimientos de este vasto reino en decadencia donde todos los animales tienen cabida, desde la etérea mariposa al pesado elefante, le ha granjeado a G. S. Cansdale la simpatía del pueblo. inglés, tan sensible al amor a los animales y para cuyo pueblo fué escrito en principio el presente libro que, más tarde, sus muchas traducciones a los más distintos idiomas han acabado por universalizar.