La gracia

La gracia santificante constituye desde luego una de las realidades supremas para el cristiano. Perder la gracia es su única tragedia auténtica; poseerla, su bienaventuranza.
Por ello es tanto más sorprendente que, a pesar de su importancia, el cristiano sepa tan pocas cosas concre tas acerca de la gracia y que se haya hecho poco menos que nada para su plir tan lamentable ignorancia. Se alude constantemente a la gracia en las obras que lee y en los sermones que escucha, pero muy poco se ha escrito o dicho sobre la realidad misma de la gracia. El cristiano necesitaba hallar una exposición inteligible y amena como la que ha escrito el padre GLEASON.
En esta obra brillan las cualidades que han granjeado al autor un prestigio internacional. Es patente su sentido del desarrollo histórico, su se gura apreciación de la tradición teológica y su plena conciencia del alcance que las realidades teológicas tienen para las necesidades espirituales del hombre de hoy.
La presente obra brindará al lector una exposición sugestiva del desarrollo que adquiere el concepto de gracia a lo largo del Antiguo Testamento. Descubrirá asimismo el proceso de creciente penetración del misterio de la gracia como «don de la vida divina» por parte de los padres que van mar cando lo que la gracia representa para Dios y para el hombre. Finalmente hallará el lector lo que aporta a la comprensión de este gran misterio el Concilio de Trento frente a la doctrina de la gracia que desarrollan los primeros teólogos protestantes. Apenas hay aspecto de la gracia santificante que el padre GLEASON no aborde y que, abordándolo, no lo ilumine con nuevas claridades.