Rejas ocultas. De Pakistan a Holanda: día a día de una pesadilla

Cuando en julio de 1997 Hameeda volvió por fin a abrazar a su familia, habían transcurrido veintinueve años desde su último y terrible adiós. Más aún, durante mucho tiempo esta joven pakistaní creyó que su madre y su hermana habían muerto, dejándola en manos de un padre despótico y violento, acostumbrado a tratar a las mujeres como a animales de carga, que hacía años había dejado pakistán para buscar fortuna en europa.
Todo empezó una oscura mañana de octubre de 1968; Hameeda tenía entonces cinco años, y de repente tuvo que dejar su pequeña aldea en pakistán para acompañar a la madre y a sus tres hermanas en un viaje a holanda, un país extraño, lleno de edificios altos y escaleras mecánicas, donde las esperaba un ser siniestro que por desgracia era su padre.
Cuando aún no se habían acostumbrado a vivir en un apartamento y a vestir prendas europeas, el hombre separó a las niñas de la madre. Encerrada en una habitación a oscuras durante horas y horas, forzada luego a hacerse cargo de las tareas más duras de la casa, Hameeda se convirtió en una joven rebelde. Con solo catorce años huyó de casa, y desde entonces fue malviviendo en centros de acogida para menores de edad, hasta que por fin tomó la decisión de volver a pakistán en busca de sus auténticas raíces.
Hoy Hameeda es una mujer fuerte y sabia, que se ha reconciliado con la tierra y la gente que la vio nacer, y esa sabiduría la ha animado a contar el calvario de su niñez en este hermoso libro, donde se encierran todo el dolor y el valor de una niña que no quiso seguir viviendo tras las rejas ocultas de su pasado.